Madre soltera, emigrate sudamericana, busca novio pa' casase, rejuntase o algo parecido ;)

Al fin después de trabajar todo el día pa´allá y pa´acá, después de dar una vuelta y tomarme una cerveza en un barcito de lo más rico con mis dos colegas del trabajo, después de ver un documental sobre los tiburones (No hay que comer tanto pescado, porque mientras más pescado consumamos, más pescan los pescadores y menos peces le quedan a los tiburones y después vienen y se lo comen  uno) Después de comerme con mucho remordimiento de conciencia una ración de salmón con Zaziki,  después de espiarle la vida a mis amigos por el FB, después de bañarme y lavarme los dientes, estoy aquí sentada frente al ordenador, esta vez en la habitación de un hotel en Berlín, una de mis ciudades favoritas. Estoy cansada, pero feliz, hoy fue un día productivo, mis compañeros de trabajo un amor y graciosísimos!! Me reí todo el día! Los pasajeros hoy estaban súper amables y habían unos más lindos ;)  Yo estaba de súper buen humor  y creo que la gente también lo percibió así.

Últimamente me siento mucho mejor dentro de mi cuerpo, y no tiene nada que ver con hecho de haber perdido peso,  ya esta sensación la tengo desde antes. Me gusto como soy, me acepto y me he dedicado diariamente a conocerme y a reconocerme, a evaluarme, a criticarme para mejorar, a darme tiempo. Desde que decidí  iniciar este proceso tengo más éxito con los hombres. Pero como “Dios no le da cacho a burro” justamente ahora es que tengo menos interés de comenzar algo con alguien!! Porque no me pasó eso hace siete años?! Cuando andaba como loca por conocer a alguien y formar una relación estable y duradera, por tener una familia!!

Emigrar es difícil. Pero ser emigrante en un país completamente distinto al tuyo, donde no tienes a nadie, en el cual el proceso de integración es largo y engorroso y además ser madre soltera de dos niñas Pre-Kínder; es una pesadilla.

Yo quería demostrarme a mí misma y al resto del mundo, que era capaz de tener y mantener una familia, además yo vengo de una cultura donde las mujeres; aunque la praxis demuestre diariamente lo contrario, son educadas según la teoría de que el éxito de una mujer depende en gran parte de si tiene un hombre al lado para apoyarla, acompañarla y protegerla. Yo no quería estar sola con dos niñas en un país extranjero, quería un hombre que estuviera a mi lado para apoyarme en la situación tan difícil por  la que estaba pasando. Mis amigas me decían: “Tienes que conseguirte a un hombre para que te ayude con tus cosas legales, para que te escriba las cartas en Alemán y te represente, mira que si estás con un tipo de aquí, la gente te tiene más respeto” También me decían algunas: “con esas niñas tan tremendas y esa casa tan desordenada, nunca vas a conseguirte ni a un suizo ni a un alemán”. Yo estaba muerta de miedo!! La mamá de una amiga que tenía a sus hijos en la misma guardería que yo tenía a las mías, nos decía: “pónganse las pilas!!! Encuéntrense un hombre antes de los 35 miren que después la cosa se pone cuesta arriba y luego uno termina acostumbrándose a vivir sola” Ya nosotras teníamos 33!!

Para las niñas tampoco fue nada fácil lo de la separación. Ellas también querían urgentemente encontrar a alguien que sustituyese a su papá. Él se había ido del país y ellas tenían muchísimo tiempo que no lo veían, la falta de un papá era muy grande. Cualquier amigo que llegaba de visita era recibido por mi hija mayor con  la siguiente frase; “¿tú te quieres casar con mi mamá?” Y la menor no perdía oportunidad para sentarse en las piernas y acurrucarse en el regazo de cualquier hombre que le ofrecía su amistad. Yo vivía con los nervios de punta, por ahí hay mucho loco suelto y uno ve las caras pero no los corazones.  Ellas eran la razón principal por la cual quería encontrar pareja. Yo pensaba que mi ex jamás iba a regresar y quería encontrarles un papá de repuesto.

Pero la cosa no era nada fácil. En primer lugar: Nadie viene a tu casa tocándote la puerta para pedirte el empate, de hecho, tengo más de once años viviendo en este país y los únicos que me han tocado la puerta sin ser invitados son los vecinos para quejarse de algo y los tradicionales Testigos de Jehová; pero ninguno de ellos representaba un partido potencial para ser el padre de repuesto de mis hijas. Aquí lo de  encontrar pareja es una vaina seria, la gente es muy cerrada y prejuiciosa. Recuerdo que en el  primer empleo que tuve; justamente durante el proceso de separación, algunos hombres se acercaban a mi Stand (los más atrevidos) para coquetear y me salían con una frase que detesto: “oh!! Latina!! Caliente!!” De hecho un día hasta me tocó aclarar que las latinas tenemos la vagina en el mismo lugar que la tienen todas la mujeres del mundo y no en la frente. Así que para mí era todavía más complicada la cuestión de conocer a un hombre que tuviera intenciones serias conmigo debido a la fama de “ligeritas” que tenemos.

Salir de noche a tomar unas copas también era una odisea, primero buscar una niñera, reajustar mi presupuesto para poder costearme los gastos de la salida y la persona que cuidara a las niñas, salir a las 10.00 de la noche porque primero tenía que dormir a las niñas y luego ir a arreglarme para que no se dieran cuenta de que me iba por ahí, llegar después de la media noche y tener que levantarme igualito a las 7.00 de la mañana a atender a las niñas. El solo pensar en el proceso me quitaba las ganas de todo y me dejaba frustrada. Hacer semejante esfuerzo tenía que valer la pena!! Tenía que ser alguien que me gustara de verdad y que yo sintiera que también gustaba de mí, pero ¿cómo iba a conocer a esa persona? ¿En el parque? ¿En la guardería?

Así que decidí meterme en una de esas páginas de conseguir pareja por internet, mi amiga Marcela me ayudó poniendo su tarjeta de crédito para poder afiliarme a la página y así fue como conocí a Andy .

Pero la historia con Andy se las cuento la próxima vez, ya es hora de irme a la cama.

Hasta pronto!! <3 <3 <3

Así se ve Berlín desde la ventana de mi hotel: